Esta semana ha comenzado la ya conocida por todos “Operación Paso del Estrecho” (OPE), en donde millones de pasajeros cruzan durante el periodo estival el Estrecho de Gribaltar, para o bien conocer Marruecos como turista o para reencontrarse con familiares que viven en el país. Este verano se prevé que unos 2,7 millones de viajeros y 700.000 vehículos crucen este paso desde los puertos de Algeciras, Málaga y Almería hasta Ceuta o Tánger.
Según indican fuentes oficiales, se prevé que los días de mayor afluencia sean a finales de junio, de julio y principios de agosto. Ya el año pasado, la cifra de personas que cruzaron el Estrecho fue de 2.677.798; un 4,3 por ciento menos que en 2007. Este año, parece que las cifras van a aumentar un poquito más, pero de forma similar a 2008.Este año es destacable la fecha de Ramadán, que empieza el 20 de agosto hasta el 20 de septiembre. Un hecho a tomar muy en cuenta en la vuelta, puesto que puede retrasarse la operación retorno a Europa hasta esas fechas. Y mientras España prepara los dispositivos para mejorar la salida de turistas europeos o personas de origen marroquí que regresan a ver a sus familiares, precisamente en Marruecos se prepara la operación “Marhaba”, es decir, “Bienvenido” en árabe, y que durará hasta cinco días antes del cierre del Ramadán.Un modo de acoger y facilitar la entrada a los marroquíes que regresan a sus ciudades de origen, y que la Fundación Mohamed V para la Solidaridad organiza desde hace años para dar asistencia administrativa o médica a todos estos miles de viajeros que han recorrido en coche tantos kilómetros hasta recibir el abrazo de sus seres queridos que viven en Marruecos. Una operación que no sólo se desarrolla en los puertos marroquíes, sino en zonas claves europeas de salida, como Algeciras en España así como en la localidad francesa de Sète o la italiana de Génova. Las autoridades marroquíes y españolas ya tienen experiencia en el control y asistencia del Paso del Estrecho, y actúan de forma conjunta, con reuniones como la pasada celebrada en mayo para esclarecer puntos y modos de colaboración durante esta época estival.El atractivo del MRELos MRE, marroquíes residentes en el extranjero, son cada vez más valorados a nivel macroeconómico por las autoridades de Marruecos, debido a las importantes inyecciones de dinero que ingresan durante todo el año al país, por ayudar a sus familiares. Pero ahora, no sólo son más valorados por el envío de remesas, sino por el nuevo perfil que se va consolidando del marroquí europeo, o marroquí americano, por ejemplo. Un marroquí que viaja a su país de origen con toda la familia para rencontrarse con sus familiares pero también para hacer turismo por el país, lo que supone una doble inyección económica por su parte. De ahí que se mime la entrada del MRE, ya no sólo por ser un hijo más de Marruecos que regresa a sus raíces aunque temporalmente, sino por ser turista potencial que durante sus vacaciones hace gastos en el país, incluso a pesar de la crisis que este año ha tocado fuertemente en toda Europa. A la vista están las ferias y encuentros que, estratégicamente, se organizan en ciudades como Tánger durante el verano de cara a inversiones empresariales en Marruecos por parte de marroquíes residentes en el extranjero.
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